La música más adecuada para las distintas actividades diarias

La música es una gran compañera de vida en nuestro día a día y tiene un impacto muy grande en la capacidad que tiene uno de concentrarse, comportarse o afrontar los desafíos de la rutina. Dependiendo de la actividad que se vaya a llevar a cabo y del contexto de ésta, puede encajar mejor un tipo de estilo musical u otro. En este artículo repasaremos cuál es el ideal según las prácticas que suelen realizar los mexicanos a lo largo de su jornada.

Trabajar

Empezamos este repaso por una de las tareas a las que se le suele destinar más horas en toda la semana: el trabajo. En aquellos puestos en los que se permite escuchar canciones, se recomiendan temas sin letras y con melodías suaves, como podrían ser las bandas clásicas o de jazz. El objetivo de éstas no es otro que mejorar la concentración y aumentar la productividad, pero sin distraer demasiado ni generar un momento de euforia desmedida.

Entrenar

En cambio, la actividad física requiere de cierto ritmo, si bien existen diferencias entre las distintas formas de entreno: no es igual salir a correr o a nadar que acudir al gimnasio. En todo caso, se necesita un nivel elevado de motivación y energía y eso se encuentra en músicas que tengan ritmo y que alegren el cuerpo con letras motivacionales. Dependiendo de cada uno y de la exigencia del reto, puede encajar el electro, el rock, el pop o el hip-hop.

Jugar a videojuegos

En muchas ocasiones, los videojuegos disponen de su propia banda sonora, pero aquellos que quieren crear su propio ambiente suelen decantarse por dos opciones: relajada, para los que invitan a concentración; o intensa, para los de acción. Lo mismo puede decirse de los juegos contenidos en los mejores casinos en línea de México, descubre en este artículo de Oddschecker dónde encontrarlos, y en el que la mejor música dependerá de la opción elegida. Para este tipo de juegos se suele recomendar una música suave, que introduzca al jugador en una atmósfera de concentración y reflexión, sin perder nunca el contacto con la cognición temporal.

Relajarse

Para relajarse y dejar la mente en blanco, normalmente se recomienda pulsaciones bajas y tratar de desligarse de ese estrés y ritmo con el que uno va todo el día. Con el objetivo de estar en un contexto agradable, se necesitan temas que sean lentos, tranquilos y suaves. Algunas canciones de pop podrían encajar en esta descripción, pero es habitual decantarse por el género clásico, con instrumentos, o ambiental, con sonidos de naturaleza.

Cocinar

Una de las tareas obligatorias para muchos es la de cocinar, se tenga o no mano para ello, y si uno quiere dar lo mejor de sí, es ideal crear un ambiente relajado y sin prisas, pero con cierto dinamismo. Para ello, una de las opciones es decidirse por el ritmo moderado de estilos como el jazz o el pop más calmado; pero, también, por la alegría y la inspiración, algo que nos puede proporcionar la música latina o las canciones con letras motivacionales.

Conducir

Manejar es de las pocas acciones que requieren un nivel máximo de concentración, pero que, a la vez, ofrecen un tiempo ideal para ir escuchando temas musicales, la radio o hablando con los otros integrantes del vehículo. Si la opción es la primera, se tiene que buscar un estilo que no entorpezca la conducción y, además, que sea relajado para evitar cualquier movimiento brusco. La electrónica más suave o las canciones para cantar pueden ayudar.

Estudiar

Muchos expertos en educación apuntan que escuchar melodías o canciones de estilo ambiental puede ayudar a las personas a retener aquello que están leyendo. Como en muchas otras prácticas que hemos mencionado, se tiene que encontrar el equilibrio entre generar un buen ambiente, pero sin distraer demasiado del principal objetivo. Así pues, los grandes clásicos de la música pueden encaja; así como, por ejemplo, las bandas sonoras de películas.